Liturgia de la Palabra
En la Fiesta de San Martín de Tours
Patrono de la ciudad de Buenos Aires
11 de Noviembre de 2007
R.P. Dr. Alfredo Sáenz, SJ
(Audio 18' 56")
 |
| San Martín de Tours ora pro nobis |
¡Oiga la Homilía abajo!
El 20 de Octubre de 1580, días después de que don Juan de Garay repartiera las tierras entre los primeros pobladores, se reunió el Cabildo para elegir al santo que ejercería el patrocinio de la recién fundada ciudad de la Santísima Trinidad y puerto de Santa María de los Buenos Aires.
Pero, lo que ha de ser, será; y el mismo nombre fue escogido tanto en la segunda como en la tercera elección, venciendo tan pertinaz resistencia.
Por eso, cuando el 11 de Noviembre cae en Domingo, en la Arquidiócesis de Buenos Aires la celebración del mismo cede su lugar a la Memoria del Santo Patrono. Esa es la razón por la cual el Domingo XXXII del Tiempo Ordinario será suplido hoy por aquella fiesta.
Cuando San Martín fue ordenado Obispo de Tours, el episcopado francés (galo-romano, para mayor precisión), bastante relajado por aquel entonces, se habían aliado con el poder político para expulsar de su cátedra a San Hilario, campeón de la lucha sin cuartel contra los herejes arrianos. Pero Martín, casi solo, se levantó de entre aquellos malos pastores negándose a guardar silencio frente a la herejía invasora.
Fundó en cuanto pudo el monasterio de Marmoutier, entendiendo que la vida contemplativa debía ser centro de irradiación de santidad en su diócesis, y que pasaría a constituir una especie de semillero de obispos y sacerdotes santos.
Su método misionero, basado en la decisión y la valentía, no era muy "ecuménico" ni "indigenista" que digamos: llegado a un pueblo emprendía, junto a los suyos, el derribo de los árboles sagrados y la demolición de los templos paganos.
Este caballero, de quien dijo don Quijote: "también fue de los aventureros cristianos, y creo que fue más liberal (*) que valiente", es el que tiene la trabajosa misión de cuidar la Buenos Aires actual, ciudad turbulenta, apóstata, llena de pobres de espíritu, de fe, de vida sobrenatural.
Que Dios nos dé pastores santos como él, que expongan la verdad y corrijan el error, verdaderos epíscopos (el que está vigilando desde lo alto), porque no podrá ser reconstruida la Ciudad de Dios sin sacerdotes santos.
(*) Liberal: Generoso, que obra con liberalidad.
Oiga la Homilía con calidad Mono
¡Por favor, deje su comentario!
Que yo recuerde el 11 de noviembre era antes feriado en la Ciudad de Buenos Aires.
ResponderEliminarMe han comentado que ha sido el gobierno del "católico" Videla, el que con el consentimiento de los "obispos" o al menos del "arzobispo" de Buenos Aires abolió el feriado.
?Alguien puede ratificar o rectificar esa información?
Que San Martín no haya sido tolerante con el paganismo y Bergoglio persiga la Misa, aunque solamente sea la de Roncalli, es natural.
El que ama la verdad combate el error y el que ama el error persigue la verdad.
Aquí no hay término medio y la llamada neutralidad confesional es una ficción.
el que ama el error persigue la verdad.
ResponderEliminares la consecuencia de no haber aceptado el amor a la Verdad, el error los imanta, los atrae; aunque no lo amen al error están a el ad-heridos.
Lo de Videla , no sé . Pero el Padre Castellani dijo y escribió que Ongania dejo entrar a los Mormones , a cambio de no sé que .
ResponderEliminarLos mormones son espias.
ResponderEliminar¿el gobierno católico de Videla?¿o el mismo gobierno posconciliar de la Iglesia descatolizó los Estados católicos, nuncios mediantes?
ResponderEliminarde que nos vamos a asombrar a estas alturas si los cuernitos ya asoman por doquier...
Así que el "católico" Onganía dejó entrar a los mormones.
ResponderEliminar?Habrá sido la presión de Estados Unidos o del Vaticano?
Los judíos y bergoglio ahora en apariencias se tienen afecto pero si se condenan se van a odiar en el infierno por toda la eternidad.
ResponderEliminarEl papa Francisco dijo este sábado durante la homilía pronunciada en la residencia de Santa Marta que "la Iglesia debe ser siempre reformada" porque sus miembros son siempre pecadores y necesitan convertirse"
ResponderEliminarNo sé por qué extraño mecanismo cerebral, tras leer las palabras siempre hueras y heresiarcas de Berboglio me vino a la mente este párrafo de San Pio X en su CARTA ENCÍCLICA PASCENDI:
(...) Hablamos, venerables hermanos, de un gran número de católicos seglares y, lo que es aún más deplorable, hasta de sacerdotes, los cuales, so pretexto de amor a la Iglesia, faltos en absoluto de conocimientos serios en filosofía y teología, e impregnados, por lo contrario, hasta la médula de los huesos, con venenosos errores bebidos en los escritos de los adversarios del catolicismo, se presentan, con desprecio de toda modestia, como restauradores de la Iglesia, y en apretada falange asaltan con audacia todo cuanto hay de más sagrado en la obra de Jesucristo, sin respetar ni aun la propia persona del divino Redentor, que con sacrílega temeridad rebajan a la categoría de puro y simple hombre.
¿Qué les parece a ustedes?. Es como si el mismo santo pontífice Pio X hubiese tenido en mente al venenoso Bergoglio a la hora de escribir la encíclica.
@Olorapescadero
Miedo me da pensar a dónde mandaría el bueno de San Martín de Tours ese engendro religioso llamado Bergoglio...
ResponderEliminar@Olorapescadero
Un grandísimo número de encíclicas anteriores al vatidos de gancia y limón te los describen a estos sátrapas de pies a cabeza.
ResponderEliminarAnónimo de las 14:36
ResponderEliminardijo
“ Los judíos y bergoglio ahora en apariencias se tienen afecto pero si se condenan se van a odiar en el infierno por toda la eternidad. “
Le contesto
Y los que odian en este blog , seguirán odiando en el infierno por la eternidad. Pues en el cielo no se odia.
usted por ejemplo odia eso que dice porque nosotros solo odiamos el error
ResponderEliminarLeyenda del escudo papal de Francisco: De Reformas en Reformas has la victoria final...
ResponderEliminar@Olorapescadero
es la realidad ahora se lamen las calcetas pero luego se van a odiar si se condenan
ResponderEliminarhasta la destrucción total será
ResponderEliminar
ResponderEliminarmire anónimo de las 16:18 pórtese bien porque si no en penitencia lo mando a una conferencia de los neo movimientos "no odiadores"
http://youtu.be/HvzHabxDNrQ
http://es.wikipedia.org/wiki/Odio
ResponderEliminarEstos modernistas eclesiales que destruyen a conciencia, o inconscientemente - me da lo mismo que lo mismo me da- a la Iglesia, están tan infectados por los macabros eufemismos al uso, al lenguaje políticamente correcto y la mentalidad progresista que, al igual que éstos últimos, ante una denuncia concreta recurren al siempre victimista discurso del odio. Si no entienden lo que decimos, odiamos. Si no concuerda lo que decimos con sus postulados, odiamos. Si Francisco nos parece un desastre teológico, espiritual y humano, odiamos. Todo en nosotros, queridos hermanos, es odio. Nos mueve el odio. Veneramos el odio. En definitiva, el odio es el motor de nuestras vidas. En cambio ellos son tan bondadosos y amorosos que la gente del pueblo al verlos pasar a su lado doblan la cerviz ante la inconmensurable grandeza del amor que desprenden.
ResponderEliminarY a lo mejor hasta se lo creen..
@Olorapescadero
wikipedios que odian trento y la verdadera misa pobrecitos
ResponderEliminar
ResponderEliminar"CUANDO EL ERROR NO ES COMBATIDO,
TERMINA SIENDO ACEPTADO;
CUANDO LA VERDAD NO ES DEFENDIDA,
TERMINA SIENDO OPRIMIDA"
San Félix III, Papa
EL ERROR ES UN OBSTÁCULO PARA EL AMOR.
ResponderEliminarEs común y moneda corriente entre la progresía española, y supongo que la del resto del orbe, indicar que lo que nos mueve a los que denunciamos el aborto como método anticonceptivo es el odio a la mujer. Éstos fantoches de la progresía eclesial, parece que poco a poco le van cogiendo el gustito al discurso oficial del "odio". Qué bajo habéis caído, ositos amorosos.
ResponderEliminar@Olorapescadero
¿Cual es el color del amor en la Iglesia de Bergoglio?
ResponderEliminarel Arcoíris.
@OaP
Pobre Bs As, se ha transformado en malos aires, llena de vanidades, y de extranjeros que duermen y defencan en las calles.
ResponderEliminarLlena de villas miseria,
llena de los pobres que tanto le gustan a bergoglio, pobres miserables hundidos en la ignorancia y el orgullo por la cumbia villera, la droga y los vicios.
Anónimo 9 de noviembre de 2013 15:46
ResponderEliminar!Así es!
La Iglesia puede y debe ser reformada en asuntos accidentales, sin jamás tocar su esencia, pues equivaldría a un intento de destrucción. Dogma de la Indefectibilidad de la Iglesia.
Por supuesto que Bergoglio cuando habla de "reformas" piensa en destruir los resabios de catolicismo que en la secta modernista quedan.
Supongo que querrá decir eso cuando afirma que los miembros de la "iglesia" son pecadores y deben convertirse. Su "pecado" consisten en tener (aun) algo de católico y este "pecado" debe ser erradicado lo antes posible.
Necesitamos santos obispos dice en la homilía el padre Sáenz, pues el debería ser obispo pero los okupas de Roma no nombran gente como el para el episcopado, no les conviene, puede "contagiar" a otros con la sana Doctrina que predica.
ResponderEliminar